Save the Children rechaza tajantemente “broma” sobre violencia sexual e insta a frenar su normalización
Save the Children condena comentarios de los comediantes Ricardo Mendoza y Norka Gaspar sobre caso de violencia sexual contra una niña e insta a tomar en serio la protección de la niñez y la violencia de género en el Perú.
Esta semana el país fue testigo una vez más de cómo la violencia de género y en particular, la violencia sexual contra una niña fue normalizada a través de las burlas. Esto ocurrió recientemente en el programa “Complétala”, conducido por Ricardo Mendoza y Norka Gaspar. En el espacio de Internet ella contó que fue testigo de la agresión sexual que sufrió una menor de edad en un transporte público. Lejos de indignarse por este testimonio, ambos comediantes decidieron hacer una “broma” al respecto.
“Desde Save the Children, como organización que lucha por la protección, bienestar y felicidad de todos los niños, niñas y adolescentes durante los últimos 100 años, rechazamos tajantemente la normalización de cualquier forma de violencia contra la niñez a través de supuestas bromas. La violencia de género y el acoso sexual callejero son problemas reales a los que se enfrentan niñas y adolescentes cada día, limitando su disfrute del espacio público y desarrollo pleno”, afirmó Verónica Valdivieso, directora de Save the Children en Perú.
La violencia sexual infantil en nuestro país es un problema realmente grave. Las cifras lo confirman. En 2015, más de 10 mil personas se encontraban recluidas en los centros penitenciarios del país acusadas por violación sexual, de los cuales 6,232 fueron procesadas por violar a un menor de edad. Así, la violación sexual se convirtió en el segundo tipo de delitos de mayor población carcelaria, después del delito contra el patrimonio.
La realidad de esta problemática no ha mejorado en la actualidad. De acuerdo con información del Instituto de Democracia y Derechos Humanos de la PUCP, entre 2017 y 2021, el delito de violación sexual en agravio de menores de edad fue el segundo más numeroso entre los delitos imputados a los internos de los establecimientos penitenciarios del país.
Para enero de 2018 la violación sexual de menores de edad ya ocupaba el segundo lugar, sólo después del robo agravado, con 8,121 internos (9.47%). En lo sucesivo, el número de internos por año por este delito, siempre fue superior; 8,878 (9.73%) en enero de 2019; 9,511 (9.89%) en enero de 2020 y 9,674 (11.15%) en enero de 2021. Entre los delitos más recurrentes entre la población penal el único que reportó incremento en el comparativo anual, enero 2020 y 2021, fue el delito de violación sexual contra menores de edad.
“Como organización hacemos un llamado a nuestras autoridades y a la sociedad en su conjunto a luchar contra la normalización de la violencia sexual en todos los espacios, públicos, privados e incluso en los medios de comunicación y programas de comedia o entretenimiento. Las campañas de información y capacitación son muy importantes, aún hay mucho por hacer para que los niños crezcan en ambientes seguros, sanos y felices”, agregó Valdivieso.