Carta de la Niñez para la Reducción de Riesgos de Desastres
Un plan de acción para la reducción del riesgo ante desastres por la niñez para la niñez
En el marco de la Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres, celebrada en Ginebra en mayo de 2011 se realizó el lanzamiento Carta de la Niñez para la Reducción del Riesgo de Desastres (RRD), elaborada con base en consultas realizadas a más de 600 niños y niñas, en 21 países de África, Asia, Oriente Medio y América Latina, en dichas consultas los propios niños y niñas identificaron prioridades para la RRD para la infancia. Las consultas se realizaron a través de Save the Children en Camboya, China, República Dominicana, Timor Oriental, Etiopía, India, Laos, Mozambique, Filipinas y Vanuatu; de Visión Mundial en Bangladesh, Brasil, Etiopía, Ghana, Kenya, Líbano, Lesotho, México, Nicaragua, Filipinas, Tanzania y Vietnam, y de Plan Internacional en Indonesia.
Esta es una Carta para los niñez redactada por los niños y niñas. Lo cual indica que la infancia está hablando del tema, esto implica nuestro compromiso de velar que sus prioridades pudieran influenciar el punto de vista de los tomadores de decisiones al más alto nivel.
La Carta presenta cinco puntos sobre la base de las prioridades identificadas por los propios niños y niñas, agrupados de acuerdo a los temas más comunes, estos puntos son:
- Las escuelas deben ser seguras y la educación no debe ser interrumpida.
- La protección de la niñez debe ser una prioridad antes, durante y después del desastre.
- La niñez tiene el derecho a participar y a tener el acceso a la información que necesitan.
- La infraestructura comunitaria debe ser segura, y la ayuda y la reconstrucción deben contribuir a reducir el riesgo en el futuro.
- La Reducción del Riesgo de Desastres debe llegar a los más vulnerables.
El objetivo de esta Carta es dar a conocer la importancia de tener un enfoque centrado en la niñez con énfasis en la reducción del riesgo de desastres. Hacemos un llamado a los gobiernos, donantes y organismos a tomar medidas apropiadas para proteger a los niños y niñas, utilizando su influencia y conocimiento en acciones de reducción del riesgo de desastres y la adaptación al cambio climático.
1. Las escuelas deben ser seguras y la educación no debe ser interrumpida
La Educación fue el tema más común y de mayor prioridad entre todos los niños y niñas durante las consultas, manifestaron que quieren tener acceso a la información y la formación de la RRD, que quieren un plan de estudios que contenga RRD y que sus escuelas puedan ser seguras, construidas sobre un terreno más apto. Ellos quieren también que los materiales de aprendizaje y los juegos les permitan identificar acciones a realizar antes de un desastre, a fin de estar protegidos y mas seguros, para luego poder seguir viviendo una vida tan normal como sea posible.
“Queremos aprender acerca de la RRD a través de actividades al aire libre, usted puede encontrar la verdad en la práctica” (niño de China).
2. La protección de la niñez debe ser una prioridad antes, durante y después del desastre
Las consultas plantearon una serie de elementos sobre la protección de la niñez, que afectan profundamente a la seguridad de los niños y niñas así como su percepción de bienestar. Manifiestan querer protección ante conductas y prácticas perjudiciales, afirman que después de un desastre se sienten inseguros, sobre todo si se ven obligados a abandonar sus hogares. Los niños y niñas también mencionan que se ha producido un aumento del tráfico de menores, del trabajo infantil y la deserción escolar como consecuencia de los desastres. Es evidente que tanto el bienestar psicosocial, como su seguridad física son afectadas de manera reiterada por los desastres, y los “canales normales” no son suficientes para proteger a los niños.
“Salimos de nuestras casas para venir aquí cuando ocurrió la inundación. Vivimos en tiendas de campaña, no nos sentimos seguros aquí” (niña de Mozambique).
3. Los niños tienen derecho a participar y tener el acceso a la información que necesitan
Los niños y niñas están listos y dispuestos a participar en las medidas para hacer frente a los riesgos de desastres y el cambio climático, quieren ayudar a difundir los mensajes clave y proteger a sus comunidades, así como a ellos mismos. Mientras que algunos niños y niñas reconocen que las medidas se han adoptado para difundir el conocimiento y la información a través de la reuniones del pueblo de radio, y visitas a las escuelas, la mayoría siente que están completamente aislados de cualquier información relacionada con los desastres y que no son escuchados o tomadas en cuenta sus opiniones. Ellos esperan y piden ayuda para aumentar su conciencia y nivel de preparación. Debemos generar el espacio para que los niños y niñas sean escuchados, deben tener la oportunidad como ciudadanos de pleno derecho a contribuir y participar en las actividades de la RRD en sus comunidades.
“Los adultos no escuchan lo que decimos” (niño de Mozambique).
4. La infraestructura comunitaria debe ser segura, y la ayuda y reconstrucción deben contribuir a reducir el riesgo en el futuro
Los niños y niñas son sensibles al daño que pueda sufrir el desarrollo de sus comunidades. Por ejemplo, para permitir el acceso continuo a servicios de salud y por lo tanto a reducir la enfermedad durante un desastre, los niños y niñas destacaron la importancia de que los hospitales y centros de salud sean seguros. También reconocieron la necesidad de mantener el acceso a su comunidad a través de mejores carreteras y puentes. Cuando estas vías están dañadas, los niños y niñas no pueden viajar con seguridad a la escuela y se ven obligados a quedarse en casa. También indican que durante un desastre, algunos servicios se interrumpen y los esfuerzos de reconstrucción a menudo son insuficientes para llevar de nuevo su vida a un nivel razonable. La niñez tienen una fuerte conciencia sobre la necesidad de limpiar y cuidar el medio ambiente y la forma en que las condiciones de inseguridad y deterioro los afectan. Por último, los medios de subsistencia que comprende la protección les ayudará a resguardar su niñez.
“El agua de la presa se puede utilizar para el riego y esto nos ayudará a conseguir comida y aprender mejor” (niño de Kenia).
5. La Reducción del Riesgo de Desastres debe llegar a los más vulnerables
Los niños y niñas reconocen que las personas se ven afectadas por los desastres. A su juicio, algunas personas son más vulnerables que otras y requieren atención especial, sin embargo, son a menudo ignoradas y aisladas. Los niños y niñas identificaron una serie de factores entre ellos la discapacidad, la edad, el sexo, la condición social y la distancia desde lugares remotos, como elementos importantes para la inclusión. Los niños también consideraron que los huérfanos y los niños pequeños por debajo de la edad de cinco años necesitan una atención especial.
“Para mí, hay una gran diferencia debido a que muchos niños con discapacidad no son tratados adecuadamente, proporcionándoles la información necesaria, ya que no están siendo tomados en cuenta por el hecho de ser discapacitados” (niña de las Filipinas).